Cuando los por qués no hallan su respuesta,
se convierten en parte de la pena,
en parte de la tristeza,
y aunque la respuesta tímida se aproxime,
el por qué no acabará nunca,
como una pregunta perpetua,
pues no hay respuesta que no pueda convertirse en pregunta,
y no hay ni quien sepa todas las respuestas,
ni quien sepa que son ciertas todas esas respuestas...
¿Por qué?
¿Por qué ocurren las no casualidades que nos ocurren?
Nuestra educación, nos obliga a tener demasiados por que, en nuestras vidas.
ResponderEliminarhagamos mas sencilla la existencia y seremos mas felices.
Los por que nos hacen mas inteligentes!
ResponderEliminarUn Besito. Marino
los por qués te obligan a viajar al interior de la mente, del alma, y aunque no se encuentre la respuesta, el viaje de por sí ya valió la pena
ResponderEliminarBesos, precioso post
Te deseo muchos porque...
ResponderEliminarBesos