Me llenas.
Me llena el recordar que fueras tan valiente,
y no cerraras tu puerta,
ensordeciendo tus oidos, con un delicioso canturreo,
cuando el miedo te susurraba, que te protegieras.
Me llena recordar que no titubearas,
cuando ejércitos de dudas ,
intentaban arrasar esos delicados jardines,
llenos de ilusiones y esperanzas plantadas.
Y sobre todo, me llena, que creyeras en mi.
Saberte amparada,
era el combustible que necesitaba para arder,
y poder encender en ti, mi llama.
Saberte feliz, me colma...
y siento que me expando,
en la medida en que me colmas.
1 comentario:
Me gusta mucho tu poema, Leal.
Sólo permíteme una pregunta -siempre seré un profano de la poesía: ¿Quiénes son las protagonistas? ¿Una madre y su hija? ¿dos amigas?
Perdona mi curiosidad.
Un saludo.
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