Decidir

Entre las opciones que tienes,
inevitablemente,
acabarás repercutiendo a otros.
Guiándote por lo que dicte tu propia conciencia,
es el único modo de acertar.
Pensar en lo que quieren los demás está bien,
pero sin olvidarse de lo que quiere uno mismo.
El compromiso con uno mismo,
es responsabilidad de uno mismo.
Como nunca va a llover a gusto de todos,
elijamos nuestro gusto,
para asegurarnos, al menos, un acierto.

2 comentarios:

carmen jiménez dijo...

Lo importante es saber lo que se quiere, luego admitirlo, y por fin tomar la decisión de ir a por ello. Parece fácil, pero a veces es más fácil esconderse tras lo que los demás quieren para no tener que enfrentarnos a nosotros mismos.
Muy acertada tu entrada.
Un abrazo.

añil dijo...

Me gusta tu entrada. Hoy me viene como a medida.

Bsos.